2004-08-17
El gallo Coltrane
Tres borrascas en agosto (por lo menos) constituyen un fenómeno extraordinario. En quince días parece haber llovido más que en cualquier otro mes del año, lo que explica que los veraneantes se suban por las paredes maldiciendo el día en que decidieron pasar sus vacaciones en la verde Galicia, tan fresca y húmeda ella. Para más inri, cuando por fin sale el sol las playas menos protegidas se llenan de sujetos en bañador desolados ante la enormidad de las olas que se desploman sobre la orilla. Queridos visitantes de la meseta: las olas nacen en el corazón de las borrascas.
Sin embargo, de todas las consecuencias que trae consigo este inesperado mal tiempo hoy vengo a contarles la que más nos afecta. El gallo que cada mañana nos despierta lo hace graznando las primeras notas del saxo de Coltrane en A Love Supreme. La sección rítmica la ponen las gotas de agua cayendo desde el alero sobre la barandilla metálica del porche.
Imposible volver a conciliar el sueño. ¶
posted by vendell 01:00
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