2002-09-02
Vendell y el tiempo
Las reflexiones posvacacionales constituyen el principal alimento de los textos de autoayuda. Fíjense en mi caso. Lo que para otros podría ser una absurda pérdida de tiempo (pasar la tarde charlando, tirando piedrecitas o leyendo en la ignominiosa postura del montoncito de arena y el brazo tras la nuca) me parecen hoy la expresión resuelta de mi voluntad. Como en un acceso de budismo, he pasado un mes ignorando por completo engorrosos accesorios como el yo, la intimidad o la propia imagen que en nuestra sociedad se han convertido en algo así como derechos ineludibles.
A la luz de esta sabiduría adquirida sin esfuerzo se hace necesaria una redistribución del tiempo que dedicamos a las cosas diversas de la vida. El trabajo presencial es intocable y, en condiciones normales, no supone una carga. El tiempo destinado a la escritura recreativa tampoco se discute (aunque sí podríamos discutir las razones por las que no se discute: apreciaría sus aportaciones). De la lectura sólo puedo decir que ya sólo sé revolotear entre las hojas como un perezoso picaflor, lo que me confiere un grado de conciencia literaria comparable al de una mariposa que sólo liba de las flores más apetecibles los sorbitos que necesita para seguir volando hasta la siguiente. ¿Qué más? Controlar las perversiones en las relaciones sociales (cada vez hay más tarugos que van por ahí proyectando sus miserias sobre los demás), cultivar razonablemente los contactos familiares, progresar en las habilidades culinarias y amatorias... seguir, en fin, los dictados del hipotálamo que para eso lo tenemos.
Total, que lo único que sobra es el marketing y el merchandising, es decir,los esfuerzos destinados a la promoción personal, el reconocimiento profesional y la obtención de méritos académicos. Agotadoras actividades cuya única consecuencia es alejarnos de nosotros mismos.
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posted by vendell 18:34
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Comentarios
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Es un inmenso placer tenerte de vuelta, vendell. Aunque seguro que disfrutabas más en el pueblo y sin conexión ;) |
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El placer es mutuo... ¿será que el conformismo era al final tan útil como lo pintaban los padres de la iglesia? |
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